Argentina celebra hoy 140 años construyendo una sociedad más justa e inclusiva junto a las comunidades en situación de vulnerabilidad.
La inquietud de la intervención de la Cruz Roja en nuestro país surgió en 1865 durante la guerra del Paraguay, afirmándose posteriormente a raíz de la epidemia de fiebre amarilla. En 1879, el gobierno argentino de Avellaneda ratificó un Convenio Internacional firmado en Ginebra y un año más tarde, en 1880, se fundó Cruz Roja Argentina, asociación civil, humanitaria y de carácter voluntario que forma parte del Movimiento de la Cruz Roja Internacional y que, actualmente, trabaja en áreas de educación, sanidad, trabajo social, entre otras.
Desde su fundación, el 10 de junio de 1880 por el doctor Guillermo Rawson, la Cruz Roja Argentina ha extendido sus acciones a todo el país, brindando asistencia a personas afectadas por inundaciones, terremotos, epidemias y otras catástrofes naturales o provocadas por el hombre.
Paralelamente desarrolla tareas en prevención y promoción de la salud y atención de grupos sociales en situaciones de riesgo, a través de centros educativos, grupos de jóvenes y proyectos de desarrollo comunitario.
“Epidemias como la de cólera o fiebre amarilla catalizaron la creación de nuestra institución en 1880. Hoy, 140 años después seguimos fieles a nuestros principios originales de contribuir a mejorar la vida de las personas, especialmente, de aquellas en situación de vulnerabilidad”, afirmó Diego Tipping, presidente de Cruz Roja Argentina.