El Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Colon se celebra el 31 de marzo con el objetivo sensibilizar y concienciar sobre la necesidad de tomar medidas para prevenir el cáncer de colon así como promover programas de detección precoz.
Según un informe de la OMS, el cáncer colorrectal es el cuarto cáncer más común en la región de las Américas. Cada año se producen en la región más de 240.000 nuevos casos y aproximadamente 112.000 muertes debidas a esta enfermedad. Canadá, Uruguay y Barbados presentan las tasas de incidencia más altas mientras que los países de América Central presentan las más bajas. En Argentina, con más de 13.000 nuevos casos al año, ocupa el segundo lugar entre los cánceres más frecuentes del país.
Clínicamente constituye una patología que se da por un crecimiento anómalo de las células del colon y la zona rectal. Comienza con un crecimiento de pólipos, que pueden transformarse, con el paso de los años en cáncer, sin embargo, hay casos de pacientes donde esto no ocurre.
Este tipo especial de cáncer puede desarrollarse durante meses sin producir molestias y, a menudo, cuando aparecen los síntomas, la enfermedad ya está bastante avanzada. Por eso los programas de detección precoz permiten detectar la enfermedad en estadios iniciales, lo que hace que sea más fácil de tratar y aumenta las posibilidades de curación.
¿Cuáles son los factores de riesgo a tener en cuenta?
- Hombres y mujeres mayores de 50 años sin antecedentes familiares.
- Hombres y mujeres con antecedentes familiares de Cáncer de Colon u otras enfermedades oncológicas como cáncer de útero, páncreas, riñón o estómago.
- Historia personal de pólipos colónicos.
El Instituto Nacional de Cáncer (INC), responsable de la coordinación de acciones integradas para la prevención y el control del cáncer en el país, promulga que la principal forma de prevenirlo es a través de un cambio en el estilo de vida, llevando a las personas a poder vivir de manera más sana. El foco principal debe hacerse en la dieta alimentaria, los individuos deben ingerir más frutas, vegetales y alimentos ricos en fibra como los cereales integrales, en lugar de alimentos procesados, grasas saturadas y comida chatarra. Estas medidas, sumadas a un mayor consumo de líquidos y agua, permiten al cuerpo expulsar fácilmente las toxinas del organismo, en especial de los intestinos.
El INC, creado en el año 2010, además promueve la necesidad de que todas las personas a partir de los 50 y hasta los 75 años, aunque no tengan síntomas, se efectúen chequeos regulares para detectar y extirpar los adenomas o detectar y tratar cualquier tipo de lesión intestinal en una etapa temprana. En caso de existir antecedentes familiares puede ser necesaria la realización de exámenes a una edad más temprana.
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